En este artículo de #Hablalocontumedico, la Dra Nathalie Orens, licenciada en Medicina y Cirugía, aborda un tema de adicción del siglo XXI: Internet. ¿Cuándo se vuelve adictivo estar conectado a Internet? ¿Es lo mismo que ser adicto a las redes sociales? ¿Cuántos tipos de adicciones cibernéticas están clasificadas? En este artículo intentaremos informarles sobre lo que se sabe hoy día.
Las nuevas tecnologías están revolucionando nuestras vidas desde hace un tiempo.
Internet puede ser una herramienta muy útil pero todo depende del uso que le demos. Puede servir para ayudarnos a comunicarnos con nuestros seres queridos que están al otro lado del mundo o pueden facilitar, entre otros y como ejemplo, el acoso escolar.
La realidad es que, a día de hoy, los especialistas no se ponen de acuerdo sobre la existencia de la adicción a Internet. Algunos plantean que no existe. No está incluida en el DSM V.
Índice de contenidos
- 0.1 ¿Cuándo estar conectado a Internet podría considerarse una adicción?
- 0.2 Los principales criterios para definir una adicción son (2):
- 0.3 Algunos especialistas distinguen tres tipos de usuarios a Internet (3) que pueden terminar siendo dependientes del uso:
- 0.4 ¿Tienes una adicción a Internet?
- 1 Bibliografía
¿Cuándo estar conectado a Internet podría considerarse una adicción?
Veamos cuáles son las características de una adicción, definidas por la Sociedad Médica Americana de la Adicción (1) y, aquí, adaptadas a una posible adicción a Internet:
- Inhabilidad de abstenerse al uso
- Incapacidad de controlar el comportamiento
- Necesidad de aumentar el tiempo de uso o de buscar otras cosas en Internet, o sea necesidad de aumentar los estímulos que se reciben o perciben e ir aumentando el tiempo de conexión. El tiempo como tal es difícil de definir pero algunos autores hablan de que un/a adicto/a a Internet podría pasarse hasta 18 horas o más conectados.
- Disminuir la importancia de estos problemas frente a uno, familiares y amigos
- Tener una respuesta emocional disfuncional como ansiedad, depresión, cambios de humor, irritabilidad, labilidad emocional y sintomatología física como dolor de cabeza, fatiga, sudoración tanto por el uso como por su suspensión, quizá los síntomas físicos se vean más en la abstinencia.
Los principales criterios para definir una adicción son (2):
- la tolerancia (cuanto más se consume, más se necesita para obtener la misma sensación),
- el síndrome de abstinencia
- y la interferencia con la vida académica o laboral“
- La interferencia con las relaciones sociales preestablecidas: familia y amigos o incluso la incapacidad de generar nuevos lazos emocionales con otras personas pueden ser otros síntomas a tener en cuenta. La adicción a Internet sería una adicción psicológica.
Algunos especialistas distinguen tres tipos de usuarios a Internet (3) que pueden terminar siendo dependientes del uso:
1- Los que lo utilizan para jugar a vídeo juegos, juegos online con o sin apuestas.
En este caso podría haber una patología preexistente, una adicción al juego, y lo que viene a hacer Internet es viabilizar esa adicción, dicen algunos especialistas contrarios a valorar la adicción a Internet como tal.
2- Los que lo utilizan para las relaciones virtuales: foros, redes sociales, correo electrónico, blogs, chats.
- El anonimato que algunas redes sociales permiten con el uso de seudónimos,
- La sensación de la inmensidad de usuarios/as que tiene Internet lo cual hace que “te pierdas” en el conjunto y actuar sin vergüenza,
- La baja autoestima
- Las dificultades para establecer relaciones personales por miedo al rechazo y/o tener sensación de pertenencia a un grupo o la sensación de irrealidad que produce (no es “real” entonces no es serio).
Todo esto puede contribuir a que las personas usuarias se sientan más cómodas, más desinhibidas, más aceptadas, y con ello expresarse más y consumir más de lo que les ofrece Internet.
Detrás de esto posiblemente haya un trastorno de socialización y lo que hace Internet es vehicular dicho trastorno, sostienen algunos especialistas, por lo que no sería una adicción a Internet.
3- Los vagabundos electrónicos que tienden a acumular todo tipo de información como libros, vídeos, enlaces a foros, etc., tipo “zapping” sin ningún fin claro.
Reúnen estos datos por el mero hecho de consumirlos y guardarlos, generándoles estrés el tener que deshacerse de ellos o que otros componentes de la familia los consulte.
No se podría descartar una nueva facilitación de Internet a un síndrome de acumulador compulsivo, trastorno psiquiátrico que ya está definido previamente por lo que se discute si se trata, nuevamente, de una adicción a Internet.
¿Tienes una adicción a Internet?
Independientemente de si la adicción a Internet como tal existe o no, y si hay un diagnóstico de trastorno previo o no, la realidad es que las personas que lo usan de forma desmedida y sin control y que acusan una serie de síntomas, no puede despreciarse y deben ser tratados por especialistas en la materia.
Es necesario generalmente un equipo interdisciplinario como el/la Médico de Cabecera, que puede ser el/la primero/a en detectar el problema o al que acuda el/la paciente que padece los síntomas, el/la especialista en Psiquiatría y el/la especialista en Psicología.
Como médicos debemos estar al tanto y atentos/as a estas nuevas modalidades que pueden favorecer comportamientos y conductas nocivas para la salud.
Por último, si aprecias o te han dicho que estás demasiado “conectado” a Internet en cualquiera de sus modalidades, no dejes de hablarlo con tu médico para que pueda ayudarte.
Bibliografía
- American Society of Addiction Medicine: https://www.asam.org/for-the-public/definition-of-addiction (Consultado el 27/09/2017 10:25 GMT)
2. Montaño Espinosa H. Adictos a la Internet. Monografía [Internet]. Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo, México 2007 [cited 2017 Sep 27]. Available from: https://www.uaeh.edu.mx/
3. 1. Mendoza Y, Méndez L, Mendoza Y, Mendez L, Ramos M, Aguilera V. Adicción a Internet. Educación, Handbook [Internet]. México, D.F.; 2014 [cited 2017 Sep 28]. p. 121–9. Available from: https://www.ecorfan.org/handbooks/Educacion.