El Técnico de Imagen para el Diagnóstico, Fernando Martín de la Cruz, explica en éste artículo que consta de dos partes: qué es una resonancia magnética y cómo se realiza. En la siguiente entrada nos comentará cómo debe prepararse el paciente para la prueba y cuáles son los riesgos de la misma.
Índice de contenidos
¿Qué es una Resonancia Magnética?
La resonancia magnética es un examen de diagnóstico seguro, preciso y no invasivo que permite detectar y diagnosticar diferentes enfermedades y patologías.
El nombre completo de la prueba es Resonancia Magnética Nuclear y normalmente se usan las siglas RMN (Resonancia Magnética Nuclear) o iRMN (imagen por Resonancia Magnética Nuclear) para referirse a ella. El nombre proviene del fenómeno físico que se utiliza para conseguir las imágenes anatómicas.
La resonancia magnética es uno de los mejores métodos para diferenciar las estructuras del cuerpo y así poder detectar a tiempo alguna enfermedad y, debido a que no usa radiación ionizante, es un procedimiento muy seguro.
No hay que confundir la resonancia magnética con la tomografía axial computarizada, más conocida por las siglas TAC o TC. Son pruebas totalmente diferentes, aunque las maquinas nos puedan llegar a parecer similares. Una particularidad de la resonancia es que emite ruido al realizarse.
Un poco de física…
La resonancia magnética es una prueba diagnóstica muy compleja tecnológicamente hablando.
Esta prueba utiliza un potente imán para conseguir un campo magnético lo suficientemente fuerte para alinear los átomos de hidrógeno de nuestro cuerpo (los humanos somos 80% agua, por lo que la mayoría de los tejidos contienen hidrógeno) para después, una vez alineados al campo magnético, emitir una radiofrecuencia que el átomo recoge y seguidamente lo expulsa. Este fenómeno físico es conocido por resonancia.
Las señales que se emiten y después se reciben, se analizan y se traducen en imágenes de muy alta calidad.
Durante la prueba escucharemos ruidos (dependiendo del tipo de resonancia más o menos fuerte) que se alternan, similares a un martilleo constante.
Estos ruidos son producidos por unos componentes internos llamados gradientes, que son los encargados de localizar el punto exacto de nuestro cuerpo de donde proviene la señal.
Es importante aclarar que las ondas de radiofrecuencia que usa la resonancia no son radiación ionizante, es decir, esta radiación que se emplea no tiene la suficiente energía para alterar la estructura de ningún átomo de nuestro cuerpo.
En realidad, usa radiación de baja energía, como las ondas de nuestro teléfono, televisor o wifi.
¿Cómo se realiza una Resonancia Magnética?
Procedimiento:
Lo primero que debemos hacer, por nuestra seguridad, es rellenar el consentimiento informado.
Cada centro puede tener el suyo propio, pero en líneas generales, en este cuestionario se deben indicar datos personales y, sobre todo, indicar las intervenciones u operaciones que nos hayan realizado.
Esto es realmente importante porque existen algunas contraindicaciones relacionados con los campos magnéticos fuertes.
A veces este procedimiento pueda parecer de puro trámite, pero para el personal técnico es muy importante y es esencial para la seguridad del paciente.
Es muy importante que indique en este consentimiento, o directamente al personal del centro, si lleva material de tipo metálico y/o electrónico (relojes, pulseras, teléfonos, etc.) y sobre todo si está intervenido de algo o lleva alguna prótesis o dispositivo electrónico en el interior del cuerpo, como electrodos o marcapasos.
Cualquier consulta, por muy insignificante que parezca, no dude en planteársela al técnico.
El tiempo de duración de la prueba es relativamente largo, puede variar entre 20 y 50 minutos, y debemos estar lo más quietos posible.
¿Qué pasa durante la prueba?
Durante la exploración el paciente es colocado por el técnico especializado sobre una camilla y la parte del cuerpo que se desea valorar se situará en el interior del imán. La zona anatómica a estudiar será cubierta por una antena receptora de radiofrecuencia.
Durante la realización de la prueba se oirá un ruido intermitente que indica que la exploración se está realizando.
Este ruido, dependiendo de la máquina, puede ser muy intenso, por lo que en ocasiones se ponen cascos protectores o tapones para los oídos. Puede llevarse sus propios tapones si lo desea.
Ésta prueba es muy sensible al movimiento, por lo que es muy importante que durante este tiempo el paciente permanezca totalmente quieto. No notará ningún dolor ni molestia.
En todo momento podrá hablar con el personal técnico, así mismo los técnicos podrán hablarle para transmitir instrucciones sobre la exploración que se está realizando.
¿Se utiliza alguna medicación?
Para realizar una RMN convencional no es necesario el uso de ningún medicamente, pero a veces es necesario inyectar un contraste.
El contraste que se utiliza en la resonancia magnética se basa en quelatos de gadolinio. El gadolinio es un elemento químico de la tabla periódica y su símbolo es Gd y su número atómico es el 64.
Es un metal raro que solo se encuentra en la naturaleza de forma combinada con otros elementos.
También es posible que en niños se use medicación para sedarlos un poco, pues es importante que durante la prueba se esté muy quieto para conseguir buenas imágenes y esto en niños es muy difícil.