Un trastorno neurocognitivo leve es un declive en las funciones cognitivas: atención, función ejecutiva, aprendizaje, memoria, lenguaje, habilidad perceptual motora o cognición social en relación con su estado previo; que, aunque no interfieren en la independencia de las actividades cotidianas, es claramente observable por parte de las personas que le acompañan en su vida cotidiana.
Por otra parte, persiste en el tiempo, no es debido a un síndrome confusional y no es debido a un trastorno mental, aunque pueda presentar alguna alteración del comportamiento.
Es muy importante que sea derivado al especialista porque el trastorno puede ser debido a causas como: tener la enfermedad de Alzheimer, degeneración del lóbulo Frontotemporal, enfermedad de Cuerpos de Lewy, enfermedad vascular, enfermedad por priones, enfermedad de Parkinson, enfermedad de Huntington, u otras etiologías.
Tener en cuenta lo necesario que es llevar una vida sana y de estimulación física y cognitiva, hacer ejercicio con regularidad, llevar una dieta baja en grasas y alta en frutas y
verduras frescas, mantenerse socialmente activo y participar en actividades que estimulen la atención, memoria, razonamiento, cálculo, praxias, lenguaje.
A continuación, en nuestra sección Cerebro Activo, la Asociación de Familiares de Enfermos de Alzheimer y otras demencias de Talavera de la Reina (Afata) te ofrece esta sopa de letras de palabras en desuso, que mantienen un recuerdo emocional relacionado con nuestra vida cotidiana en el lenguaje coloquial de una época de nuestra vida.
